viernes, 4 de noviembre de 2011

EL TIEMPO

UNA EXRAÑA HISTORIA SOBRE EL TIEMPO


POR: SEELFREI
Mire el reloj y ví con extrañeza que no lo traía conmigo, “Lo olvide”, pensé, al levantar la cara vi que me encontraba de noche, en una calle muy particular, ninguna de las grandes casas que la formaban tenía dirección alguna y su iluminación era muy pobre. Extrañamente no sabía como había llegado allí, lo único que sabía era que allí estaba, nada más, al observar la calle empecé a caminar, tal vez para salir al otro lado e ir a casa o solo por curiosidad de explorar la extraña calle en que me encontraba, creo que fue más la curiosidad de explorarla que me incitó a caminar por ella, “No la conozco”;dije en voz baja, caminé lentamente no sentí miedo alguno, al contrario, sentía paz, cuando empecé a llegar a la mitad de mi recorrido, sentí un gran dolor en la cabeza, se me hizo algo bastante extraño, ya que lo que sentía era un fuerte golpe provocado por algo, no le preste mayor atención y seguí mi camino.

Cuando me encontraba exactamente en la mitad de la calle me tocó parar, el dolor era incontenible, con la mano me toqué la cabeza en un esfuerzo desesperado de parar el fuerte dolor de cabeza que me envolvía, poco a poco perdía la fuerza de mi cuerpo “pensé que no iba a resistir”, al retirar la mano de mi cabeza, cual fue mi sorpresa al darme cuenta que me encontraba sangrando, quedé allí parado tratando de asimilar la situación, de recordar lo que había sucedido, pero fue inútil no recordé nada. Al otro lado de la calle bruscamente alguien abrió una puerta y de ella salió una sombría silueta que no alcance a distinguir, por la poca iluminación que envolvía la calle, eso y el fuerte golpe que tenía en la cabeza hacía que mi visión no fuera clara, poco a poco se acerco a mi, caminando lentamente a través de la calle.

Tenía tanto dolor que no pude correr y en un esfuerzo desesperado empecé a pedir ayuda, cuando nos encontramos frente a frente, y logré ver la silueta claramente… era algo indescriptible, extraño y de cierta manera no tenía forma alguna, mas que un ente era una presencia, la mire durante unos segundos, en ese momento me encontraba tirado en el piso de la acera, indefenso y con el fuerte dolor de cabeza, me desmayé y con mis últimas energías miré fijamente a la presencia que me acompañaba.

 Al despertar, me encontraba en presencia de varias personas que me observaban detalladamente, me sentía mareado lo que me impidió ver claramente sus caras y donde me encontraba, al recobrar un poco de fuerza logré observarlos detalladamente y ví con gran sorpresa que los que me acompañaban eran mis padres y mis amigos, les pregunte que hacían allí parados, pero no respondieron  y siguieron observándome, les volví a preguntar y como la anterior vez no me respondieron, después ví que se alejaban lentamente de mi, trate de gritarles que no me dejaran solo pero no me hicieron caso y desaparecieron en el horizonte.

Al quedar completamente solo me cuestioné en qué lugar me encontraba, mire alrededor y me di cuenta que me encontraba en una gran planicie que se perdía en los cuatro puntos cardinales y el cielo era totalmente blanco ¿Dónde diablos estoy metido? me pregunte, después de darme cuenta de que estaba perdido, empecé a caminar sin rumbo, diez minutos después me sentía muy cansado así que pare  y observé por segunda vez el supuesto cielo que estaba encima mío, no estaba el sol ni la luna solo blanco…Que cosa tan extraña, dije en voz alta, una gran voz que no sé de donde provenía me preguntó: ¿Sabes donde te encuentras? Y obviamente le respondí que no, el me respondió; te encuentras en donde todo termina, en el fin del mundo, acabas de morir… no pude asimilar tan impactante noticia así que deduje que se trataba de un sueño, pero muy pronto esta idea cambiaría radicalmente…

Trin, trin,trin,trin…¡Hora de despertarse! Si fue un maldito sueño muy real pero al fin al cabo sueño, pensé y me levanté de la cama refunfuñando, la mañana fue tan normal y monótona como la de todos los días; bañarse, vestirse, desayunar y coger el bus rumbo al trabajo. Al llegar al trabajo les conté a mis compañeros lo que había soñado aquella noche, ellos opinaron que era un sueño muy interesante pero a la vez muy ilógico,  al salir de trabajar me envolvió un extraño presentimiento pero no le preste atención allí iba rumbo a casa como todos los malditos días a dos cuadras de llegar a mi casa el presentimiento se hizo más grande, en ese instante, en ese segundo sin darme cuenta tropecé con algo y caí fuertemente al pavimento, haciendo que el reloj se me cayera y saliera volando de mi muñeca, viendo  como se rompía en mil pedazos, se había muerto el tiempo… me levanté y empecé a caminar sin rumbo alguno…
                                                           ¿FIN?

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